Subastaron el “Auto Fantástico”

El famoso Knight Rider de la serie de televisión de los años ’80 se vendió vía online.
Por: Julián Afonso Luis / @JAL69 (Twitter)
El actor norteamericano David Michael “Hasselhoff” Hoff vendió en subasta el automóvil que lo hizo famoso en la serie televisiva Knight Rider, que en Latinoamérica conocimos como El Auto Fantástico.
El automóvil, propiedad del actor, es un Pontiac Firebird Trans Am fabricado en EE.UU. en 1982 y que para efectos de la serie fue ligeramente modificado en su exterior e interior, con el fin de conferirle características distintivas.
La subasta fue conducida por la empresa Live Auctioneer, especialista en dirigir ventas online, como parte de la subasta denominada The Hoff Auction, que además del auto ofreció otros objetos de memorabilia vinculados al actor y usados en series como Knight Rider y Baywatch (Guardianes de la bahía, en Latinoamérica).
Un Pontiac fantástico
En la teleserie El Auto Fantástico, el Pontiac se denomina K.I.T.T (siglas de Knight Industries Two Thousand) y según la empresa que lo subastó “está en condiciones totalmente funcionales y eso incluye su colorido panel de instrumentos iluminado y su consola especial, que tanto recuerdan los aficionados”.
La promoción incluye otro detalle especial, pues el propio actor será quien entregue el auto a su nuevo propietario, cuya identidad aún no ha sido divulgada.
Actualmente el Pontiac se encuentra en Gran Bretaña, pero el precio incluye “la entrega en el lugar del mundo en que viva su nuevo dueño, donde quiera se encuentre”.
El Auto Fantástico se transmitió en EE.UU. entre 1982 y 1986 con gran éxito. Para ello fueron preparadas varias unidades Firebird Trans Am de 1982, pero la que se ofreció en venta es la denominada “show car”, usada para las tomas de acercamiento, las fotos promocionales y los eventos estáticos, por lo cual no recibió los maltratos a los que habitualmente se someten los autos empleados en series y películas.
Hasselhoff recibió el auto de los productores del programa y lo conservó en propiedad durante casi cuarenta años, manteniéndolo en condiciones impecables, hasta que a inicios de este mes anunció en su cuenta oficial de Twitter que lo subastaría.
El valor de la fama
Originalmente se estimó que el precio del Pontiac K.I.T.T. se situaría entre los US$175.000 y los US$300.000, pero la noticia de su venta hizo enloquecer a los aficionados, por lo que las pujas rondaron el millón de dólares. Nada mal para un auto que, en el mercado de ocasión, se puede comprar por el 2% de ese valor.
En 1982, la versión Trans Am era la más ambiciosa de la línea Pontiac Firebird, que ese año estrenaba su tercera generación. En su momento, fue el auto de producción en serie más aerodinámico del mundo, con un coeficiente de arrastre de Cd.0,31, gracias a sus esbeltas líneas y elementos de “efecto suelo”.
En la ficción de la serie, el Pontiac K.I.T.T. tenía un supercomputador que le permitía ser conducido de manera normal o por comandos de voz. El sistema incluía la modalidad de manejo autónomo, que permitía al auto moverse empleando inteligencia artificial, detectar obstáculos y activar armamento.
Además, el vehículo podía hablar; para dar forma a este elemento de ficción, se contrató al actor norteamericano William Daniels.
Otros objetos de esta producción también fueron subastados, incluyendo ropa y demás accesorios. Un pequeño auto de pedal de juguete, autografiado por el actor, fue subastado en US$3,000, a pesar de no estar en perfectas condiciones. La subasta incluyó juguetes y afiches, también autografiados.